Armada. Grandes personajes:
3 de Febrero de 1790. Expedición de 1790 al Noroeste.
Caamaño parte de San Blas a la Alta California.
Jacinto Caamaño Moraleja (1759-1825?) fue el jefe de la gran exploración española a Alaska. Era Caballero de la Orden Militar de Calatrava. Procedía de una familia gallega aristocrática asentada cerca de Santiago de Compostela. Su padre era Juan Fernández de Caamaño, y su madre, Mariana Moraleja Alocen. Entró en la Armada como guardiamarina a los 18 años, alcanzando dos años después el empleo de Alférez de Navío.
Algunos años más tarde formó parte de una expedición político-comercial a Constantinopla para establecer relaciones comerciales con Turquía, Polonia, y Rusia.
Después de un viaje a Cuba en 1787, fue enviado a la costa pacífica de México, en el puerto de San Blas, como jefe para la exploración del noroeste del Pacífico. Allí estuvo junto a su cuñado Francisco de Eliza, que se distinguiría como gobernador de Nootka adyacente a la isla de Vancouver.
Trasladó en su nave a México al Virrey recién nombrado de Nueva España, Juan Vicente de Güemes Padilla Horcasitas y Aguayo, segundo Conde de Revillagigedo. El 3 de febrero de 1790, Caamaño participó en una expedición al noroeste del Pacífico. Allí mandaba el Rosario (apodado el Princesa), la fragata de Nuestra Señora de 189 toneladas construida en San Blas para la exploración del norte.
En el primer viaje no fue más allá de Nootka, fue en su siguiente, (1792),
cuando llegó hasta la Bahía de Bucarelli la mando de la fragata Aránzazu, una nave construida en Cavite en las Filipinas. Esta expedición hizo un estudio cuidadoso de la costa de Bucarelli hasta Nootka, confeccionando el mapa de Alaska y de la actual Columbia Británica dejando un rosario de nombres españoles en los topónimos costeros.
Finalizado con éxito su viaje a Alaska, Caamaño fue enviado, después de una breve estancia en San Blas, a través del Océano Pacífico a las Filipinas. A partir la 1794 y hasta 1807 sirvió en diversos puestos entre México y Perú, contrajo matrimonio en uno de sus viajes a Ecuador con Francisca de Arteta Santistevan, quien le dio ocho hijos.
En 1820 vivía en Guayaquil, el lugar de nacimiento de su hija pequeña, pero no se sabe nada de la fecha y del lugar de su muerte. Algunos de sus descendientes permanecieron en Ecuador, uno de ellos José Placido Caamaño fue presidente de la República de Ecuador.
La isla de Caamaño, en la Bahía canadiense de Puget, fue así llamada para honrar la memoria de Jacinto Caamaño.